El genio de Cervantes ha sido tan aclamado que da vergüenza insistir. Participa de todo el saber conocido, y le encanta el desconocido. Rompe cualquier esquema aprendido, y seguramente, por aprender deshace certezas, reta nuestra imaginación, duda de los dogmas, plantea imposibles, y así, le da la vuelta a los bolsillos de la vida, convenciéndonos de que los territorios transitados no lo son tanto, y que nos queda mucho por descubrir. ¡9clases!